La magia de Disney brilló en el Biffi Song Festival
Por: Isabella Vergara - Promoción 111
Durante una semana llena de emoción, creatividad y magia, el Colegio Biffi La Salle celebró una nueva edición del Biffi Song Festival, uno de los eventos más esperados del año. Del 30 de septiembre al 3 de octubre, bajo la temática “Disney”, la institución se transformó en un escenario de fantasía donde el arte, el inglés y el talento de los estudiantes fueron los grandes protagonistas.
Participantes debutando con coreografías.
Antes del día central, los lasallistas participaron en diferentes competencias que pusieron a prueba su dominio del inglés y su creatividad. Hubo concursos de Tongue Twisters, disfraces y storytelling, en los que los estudiantes demostraron que aprender un idioma también puede ser divertido. Las risas, la emoción y la participación de todos los grados hicieron que la semana previa estuviera llena de energía y compañerismo.
El gran evento reunió a estudiantes de otras instituciones en el concurso intercolegial de canto y el concurso intercolegial de coros, donde las voces brillaron con fuerza y las presentaciones reflejaron muchas horas de preparación. Además, todos los grados, desde preescolar hasta undécimo, presentaron bailes inspirados en películas de Disney, llenando el escenario de color, ritmo y alegría. Ver a los más pequeños y a los mayores compartir la misma pasión fue, sin duda, uno de los momentos más especiales.
El Coro de Voces Blancas recibiendo su trofeo.
Sin embargo, el Biffi Song Festival no solo fue música y disfraces; también representó una muestra del impacto del bilingüismo en nuestra formación. A través del arte y el inglés, los estudiantes aprendieron a expresarse con confianza, a trabajar en equipo y a disfrutar el proceso de aprendizaje de una forma diferente y significativa.
Cada canción, cada coreografía y cada historia contada fueron prueba del talento y la dedicación que caracterizan a nuestra comunidad. Más que una competencia, el festival fue una celebración del esfuerzo, la creatividad y el orgullo de ser lasallista, donde el bilingüismo se vive con pasión, alegría y compromiso.
